NORTE HOY - La causa por la muerte de Yael Rodríguez, de 37 años, recibió un giro clave tras el análisis de las pericias médicas que evaluaron la atención que recibió desde los días previos a su cirugía hasta la operación de urgencia que derivó en su fallecimiento.  El informe pericial señala que la cirujana Clara Bilbao realizó la intervención quirúrgica inicial dentro de los parámetros normales y deslinda cualquier responsabilidad sobre su actuación. La evolución postoperatoria se consideró acorde a lo esperado, y la conducta adoptada ante el malestar de Yael fue calificada como “expectante”. En contraste, el análisis determinó que el médico de la guardia de ginecología, Franco Roselli, incurrió en graves omisiones. Tras la indicación del Centro de Salud Las Canaletas de realizar estudios urgentes ante la sospecha de perforación intestinal, Roselli no solo no ordenó los análisis completos, sino que además otorgó el alta el mismo día, el viernes 24 de enero. La paciente volvió dos días después al hospital con un cuadro agravado de septicemia generalizada. Durante la cirugía de urgencia se retiraron dos litros de líquido purulento, pero Yael falleció horas más tarde en terapia intensiva. El perito médico Ricardo Bay, de la Asesoría Pericial del Poder Judicial, concluyó que “el erróneo otorgamiento del alta derivó en la prosecución de la patología que culminó en su fallecimiento”. Otros peritos intervinientes, como Virginia Creimer y Jorge Luis Mecco, coincidieron en que Yael “requería una resolución quirúrgica de emergencia” que no se concretó. La causa, que se tramita en la Fiscalía N° 11 bajo la conducción de Viviana Ramos, cuenta con el patrocinio de la abogada penalista Sofía Sanjurjo para la familia de la víctima. La investigación sigue recabando elementos para determinar las responsabilidades legales correspondientes. El caso ha generado un fuerte impacto en la opinión pública, planteando serias dudas sobre los protocolos de guardia y la responsabilidad profesional en situaciones críticas. NORTE HOY